El Mito real del Amor 🥰🤩

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La historia de Eros y Psique. En ella, Psique está casada con un dios desconocido, Eros. Vive en una situación de dicha apasionada hasta que la envidia de sus hermanas la impulsa a averiguar la verdadera identidad de su esposo, cosa que le ha sido prohibida expresamente, y cuando lo ve cara a cara, él huye furioso. Con el fin de recuperar a Eros, Psique debe llevar a cabo cuatro tareas que le parecen abrumadoras. Las fija Venus, la diosa del Amor, que trata a Psique con desdén y ordena a sus servidores, Pena y Tristeza, que la torturen.

La primera tarea consiste en clasificar una enorme cantidad de semillas antes de que llegue la mañana. Psique está a punto de fracasar, pero cuando ya desespera, llegan unas hormigas que la ayudan. La tarea de cualquier amante consiste en separar lo que es propio de lo que pertenece a su pareja. Las hormigas simbolizan el poder instintivo del inconsciente para llevar a cabo este trabajo. Lo único que hay que hacer es dejar que este proceso tenga lugar. A la mañana siguiente, todo está clasificado. A veces tenemos esta experiencia, después de una noche de buen sueño, al despertar con una absoluta claridad de pensamiento y una visión neta de nuestro próximo paso.
Venus queda asombrada e impone otra tarea a Psique:

Debe recoger los vellones de los dorados moruecos solares, tan fieros que ningún mortal se atreve a acercarse a ellos. Psique está a punto de abandonar y arrojarse al río cuando, cerca de la orilla, un junco le murmura que la solución no consiste en hacer frente a los moruecos, sino en esperar a que caiga la noche, cuando su energía está dormida; entonces puede recoger su lana de las matas y ramas contra las que, en su furia, se han frotado. A menudo debemos esperar pacientemente el momento adecuado para hacer algo, si no querernos vernos abrumados. El junco forma parte del mundo natural, que sabe cómo coexistir con la energía salvaje y peligrosa.
Venus está furiosa cuando Psique regresa.

Le asigna una tercera tarea: traer agua de la cascada fría como el hielo del río Estigia, tarea imposible considerada desde una perspectiva humana. Una vez más, Psique está a punto de abandonar cuando acude a ayudarla un águila que vuela con el agua contenida en un casco de caballo. El agua es tremendamente destructiva, pero también da vida. La creación y la destrucción son las dos caras de una misma moneda. No es posible conseguir el agua con medios corrientes, pero puede traérnosla un águila, que es la reina de las aves y simboliza los poderes reales del interior de la psiquis.

La cuarta y última tarea impuesta a Psique consiste en viajar al Averno y obtener de Perséfone una caja que contiene un ungüento embellecedor. Psique fracasa porque cede a la tentación de abrir la caja antes de entregársela a Venus, impulsada en parte por la curiosidad y en parte por el deseo de estar bella para su amado. El ungüento de belleza la hace caer en un sueño profundo. Eros, que ha estado malhumorado durante todo este tiempo, la ve y acude a salvarla.
Justo cuando creemos que las cosas se han vuelto contra nosotros, a veces están, de hecho, a nuestro favor. Pero resulta peligrosa esta convicción, pues si decidimos declararnos vencidos, podemos pensar que la otra persona vendrá a rescatamos. Psique no planea nada de esto, sino que, simplemente, sucede.

El drama de Eros y Psique no se refiere a una mujer conquistando el amor de su hombre. En realidad se refiere al alma capaz de tener el valor de establecer una relación auténtica, que es lo que realmente es Eros. Cuando Psique y Eros se reúnen, nace una hija, FELICIDAD. Todos nosotros tenemos dentro aspectos de Eros y de Psique. El objetivo de las tareas consiste en mostrarnos la riqueza de recursos de nuestro mundo interior a la que podemos recurrir.

TRABAJO INTERIOR:
Examina alguna relación tuya del pasado.
¿Qué cualidades tenía?
¿Por qué terminó?
¿Qué proyectaste en la otra persona (y ésta en ti)?
¿Qué puedes aprender de lo ocurrido?