ORIGEN DE LOS CELOS HUMANOS

Desde un punto de vista biológico, algunos investigadores han propuesto que los celos pueden tener una función adaptativa en la evolución de los individuos, ya que ayudarían a proteger los recursos y asegurar la supervivencia de la descendencia.

Desde una perspectiva psicológica, los celos pueden surgir como resultado de inseguridades personales, miedo a perder a la pareja, baja autoestima o experiencias traumáticas relacionadas con infidelidades o abandono.

Finalmente, los aspectos sociales también influyen en el origen de los celos, ya que las normas culturales y la influencia de la sociedad pueden aumentar o disminuir la probabilidad de experimentar celos en una relación.

Uno de los motivos es que los celos suelen estar relacionados con nuestra necesidad de sentirnos seguros y protegidos en relaciones interpersonales. Cuando percibimos una amenaza hacia nuestro con alguien, ya sea real o imaginaria, es normal el vínculo que surja la sensación de celos.

Otro factor que influye en los celos es nuestra tendencia a compararnos con los demás. En la sociedad en la que vivimos, estamos expuestos constantemente a mensajes que nos sugieren que debemos ser los mejores en todo: tener el mejor trabajo, el cuerpo más fit, la pareja más atractiva, etc. que la nuestra, pueden surgir los celos.

Además, los celos también pueden tener su origen en experiencias pasadas traumáticas, como una infidelidad o una pérdida de confianza en alguien importante para nosotros.

Lo importante es manejar los celos de forma saludable para no poner en peligro nuestras relaciones y nuestra autoestima. Una buena estrategia puede ser reflexionar sobre las causas de nuestros celos y hablar abiertamente con la persona que nos genera esa sensación. También es importante practicar la empatía, ponerse en el lugar del otro y comprender que cada persona es un mundo en sí mismo y, por ende, no tenemos por qué compararnos.

En conclusión, los celos son una emoción muy humana que surge por nuestra necesidad de sentirnos seguros y protegidos en nuestras relaciones interpersonales. Es importante reconocer cuando los celos nos están perjudicando negativamente y buscar maneras saludables de manejarlos.